HIDROBOLETÍN FENTAP
Jueves 05
de junio de 2014 – Año IX – Edición 1996 – www.fentap.org.pe
La FENTAP informa:
- Perú - Los ríos Piura y Chira siguen en situación crítica por contaminación.
- Chile - Cámaras de Turismo de Aysén piden al Comité de Ministros que rechace la resolución que aprobó HidroAysén. Las agrupaciones de La Junta, Puyuhuapi y Coyhaique y la Agrupación Cultural y Ambiental de Puerto Río Tranquilo señalaron que "el turismo es una actividad económica instalada y con un enorme potencial de crecimiento, que se vería severamente coartada si se materializarán estos proyectos".
- Chile - Justicia condena a empresas por derrame de petróleo.
- Hidroalerta - El agua sobra pero falta en Venezuela.
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Los ríos Piura y Chira
siguen en situación crítica por contaminación
RPP
– 04/06/2014.- El director de Operaciones del Proyecto Especial Chira Piura,
Eugenio Tadeo Ramos, manifestó que los ríos Chira y Piura se encuentran en
situación crítica debido a la contaminación.
En
el caso de Sullana, el número de contaminantes llega a las 260 mil, cuando lo
máximo permitido es 2 mil.
El funcionario precisó que un millón de
personas se abastecen de este sistema para uso poblacional; así como para
actividades económicas que sustentan a la región como agricultura, piscicultura
e industria.
En
el caso de Sullana y sus distritos, donde la totalidad del sistema de
alcantarillado desemboca en el río Chira, el funcionario municipal, Fernando
Brossard del Rosario señaló que ante la imposibilidad de derivar las aguas
hacia la laguna de oxidación de El Cucho, la EPS Grau vierte las aguas
residuales directamente al río, en proporción de 500 litros por segundo.
Para
dar solución a este problema, informó que la Municipalidad de Sullana está
realizando los estudios para la construcción de una planta de tratamiento de
aguas residuales domésticas e industriales con tecnología moderna, a cargo de
la empresa japonesa Nippon Koei Lac.
Con
esta medida las aguas tratadas podrán ser reutilizadas o vertidas al río Chira
y precisó que hay interés del Ministerio de Vivienda en llevar a cabo este
proyecto, cuya construcción demandará una inversión de 150 millones de dólares.
HIDROMUNDO
Cámaras de Turismo de
Aysén piden al Comité de Ministros que rechace la resolución que aprobó
HidroAysén
Las agrupaciones de La Junta, Puyuhuapi y
Coyhaique y la Agrupación Cultural y Ambiental de Puerto Río Tranquilo
señalaron que "el turismo es una actividad económica instalada y con un
enorme potencial de crecimiento, que se vería severamente coartada si se
materializaran estos proyectos".
http://www.eldinamo.cl/
- 3/06/2014.- Las cámaras de Comercio y Turismo de La Junta y Puyuhuapi, la
Cámara de Turismo de Coyhaique y la Agrupación Cultural y Ambiental de Puerto
Río Tranquilo reiteraron ante el Comité de Ministros su interés en que
considere las reclamaciones presentadas por las agrupaciones en el marco de la
evaluación del estudio de impacto ambiental de HidroAysén.
A través de una misiva, ingresada el pasado 30 de
mayo en las oficinas del Servicio Evaluación Ambiental de Coyhaique, las organizaciones exigieron que “en
definitiva se rechace el proyecto”, revocando su resolución de calificación
ambiental favorable.
Explican en ella que sus argumentos “se relacionan
con una serie de estudios y compromisos no considerados tanto en el proyecto
como en la resolución de calificación ambiental, que son esenciales para la
sustentabilidad económica del turismo y, consiguientemente, la sustentación de
cientos de familias de la región de Aysén”.
Tras destacar como el turismo es una actividad
económica instalada y pujante, “con un enorme potencial de crecimiento en
nuestra región” enfatizan como la actividad “se vería severamente coartada si
se materializaran estos proyectos, como fue demostrado por diversos estudios de
la Universidad de Chile”.
“Estos elementos, así como muchos otros que hemos
planteado reiteradas veces durante el largo proceso de evaluación del estudio
de impacto ambiental del proyecto HidroAysén no fueron debidamente
identificados, evaluados y consiguientemente mitigados, y esto desde un
principio”, agregan.
Firman la carta el presidente de la Cámara de Turismo
de Coyhaique Manuel Iduarte, la presidenta de la Agrupación Cultural y
Ambiental de Puerto Río Tranquilo Tamara Ullrich, la presidenta de la Cámara de
Comercio y Turismo de La Junta Constanza Palacios y la presidenta de la Cámara
de Comercio y Turismo de Puyuhuapi Verónica Gallardo.
Copia para Máximo Pacheco
Una copia de la carta fue entregada la tarde del
viernes en Coyhaique al ministro de Energía Máximo Pacheco, quien también
integra la instancia que el 10 de junio decidirá sobre HidroAysén.
En la ocasión los empresarios turísticos manifestaron
que “no nos oponemos a la generación de energía, pensamos de hecho que es una
actividad necesaria y fundamental para nuestro propio quehacer. Nos oponemos
sin embargo a proyectos invasivos que por su sola presencia limitan o condenan
el desarrollo de otras áreas productivas, que para muchos de nosotros no solo
representan una actividad económica sino que un proyecto de vida”.
Asimismo destacaron que la región cuenta con los
recursos naturales renovables para que se pueda desarrollar una matriz
energética independiente basada en dichos recursos. “Si a estos esfuerzos
adicionamos eficiencia energética, Aysén se puede transformar con facilidad en
un ejemplo de desarrollo energético para el país”, indicaron.
De cara a las reiteradas necesidades nacionales de energía,
indicaron que “nuestro país cuenta con recursos renovables distribuidos
uniformemente en el territorio que pueden constituir una matriz inteligente y
eficiente a nivel nacional. En la agenda energética presentada por usted
(Máximo Pacheco) hace algunas semanas, vemos con alegría que muchas de las
líneas de trabajo allí mencionadas van en esa dirección y esperamos que se
puedan concretar no solo en los próximos 4 años, sino que en un horizonte más
amplio”.
Justicia condena a
empresas por derrame de petróleo
http://www.eleconomistaamerica.cl/
- 03/06/2014.- La Corte Suprema
condenó a empresas navieras reparar el daño ambiental
provocado por el derrame de hidrocarburos desde la motonave "Liquid Challenge",
que se produjo el 20 de septiembre de 2009, en la bahía de Mejillones, Región
de Antofagasta.
En fallo unánime, la Tercera Sala del máximo tribunal
ratificó la sentencia apelada y ordena a las empresas Minimal Enterprises
Company, armadora y propietaria de la motonave, y Elmira Shipping &
Trading, operadora, pagar solidariamente los perjuicios causados por la
contaminación y daño ambiental producido por el vertido de petróleo.
La resolución de primera instancia -dictada por el
ministro en visita de la Corte de Apelaciones de Antofagasta Óscar Clavería
Guzmán, y confirmada por la Corte de Apelaciones de Valparaíso- acogió la
demanda de indemnización de perjuicios, presentada por el Estado de Chile en
contra de las navieras.
HIDROALERTA
El agua sobra pero falta
en Venezuela
http://www.ipsnoticias.net/ -
03/06/2014.- Los habitantes de Venezuela soportan el racionamiento del servicio
de agua potable, y en algunas zonas una pésima calidad del líquido, pese a que
este territorio es bañado por 520 ríos de gran longitud.
Uno de ellos, al que Julio
Verne llamó “soberbio Orinoco”, es el tercero más caudaloso del mundo, después
del Amazonas y el Congo, con centenares de afluentes en una cuenca de casi un
millón de kilómetros cuadrados que desemboca en el océano Atlántico.
“Desde 2011 los grifos
están casi siempre secos. Aquí las familias ponemos cada una unos 1.000
bolívares mensuales (20 dólares, la cuarta parte del salario mínimo) para pagar
(camiones) cisternas que nos traen agua”, contó a Tierramérica la comerciante
informal Dulce Hernández, de Carayaca, poblado del litoral caribeño al noroeste
de Caracas.
El mecánico Luis Mejía,
residente en Maca, un barrio pobre del este caraqueño, también se queja porque
“sobrevivimos con camiones de agua que nos mandan las alcaldías y estamos bajo
la doble amenaza de que padecemos sed, pero si llueve de repente se nos puede
desbordar el río” Guaire, que cruza Caracas y a cuya vera creció la barriada.
La capital y otras ciudades
se van poblando de historias: escuelas que devuelven a los niños a casa más
temprano por falta de agua para los servicios sanitarios, fondas y restaurantes
que dejan de preparar bebidas o simplemente cierran, pequeños huertos que se
secan, cierre de vías por manifestantes que protestan al cabo de muchos días
sin servicio.
No es un problema solo de
sectores populares: en el barrio de clase media de Chacao, la abogada Nuria
García, luego de cuatro días bañándose con un pequeño cubo, montó “una
emboscada” al servicio y regresó a casa un poco más temprano. “Había agua en la
regadera. Fue como una fiesta, me di un rumbón”, ironizó.
En la exclusiva zona de
Altamira, este periodista acude a una entrevista en la embajada de un país
europeo. Le ofrecen una taza de café. Un minuto después, se cancela la oferta:
no hay agua en las cañerías ni siquiera para hacer funcionar la cafetera.
Desde 2008 Venezuela se
ufana de haber alcanzado una de las Metas del Milenio en acceso al agua
potable, con una cobertura de 96 por ciento de sus 30 millones de habitantes.
Pero en 2003, 2009 y ahora
en 2014, con el vaivén de los fenómenos oceánicos y climáticos El Niño y La
Niña, que se originan en el Pacífico Sur y afectan el régimen de lluvias,
grandes sectores de población urbana y rural constatan que los tubos no traen
agua, o lo hacen muy espaciadamente, o es de color marrón por la arcilla, o
verdosa por la materia orgánica.
En el centro-norte, donde
están el lago de Valencia (de 344 kilómetros cuadrados) y la ciudad industrial
del mismo nombre, los vecinos que cierran vías en protesta por la escasez de
agua coinciden con los que lo hacen por la mala calidad del líquido.
“Estamos agradecidos con el
gobierno que nos entregó estas casas, pero vivimos con un enemigo que es el
agua verde de los tanques. La hervimos para cocinar, pero no es segura, y
bañamos a los niños con miedo”, dijo a Tierramérica Hilda Rosales, habitante de
una “petrocasa” (con paredes de aglomerados plásticos) en Guacara, a un costado
de Valencia.
En esta zona “coincide la
escasez con la pésima calidad. Frente a una y otra, los organismos oficiales
apuestan a las lluvias que llenan estanques y lavan desechos minerales y
orgánicos que obstruyen los sistemas”, apuntó a Tierramérica el ingeniero
sanitarista Manuel Pérez Rodríguez, del Movimiento por la Calidad de Agua, que
actúa en la región.
El nivel del lago de
Valencia creció cinco metros en los últimos años, invadió 10.000 hectáreas de
terrenos y afectó barrios de la ribereña ciudad de Maracay. Ante el peligro de
mayores inundaciones, el Ministerio del Ambiente y las empresas hídricas
estatales decidieron trasvasar parte de sus aguas al embalse regional
Pao-Cachinche.
Ese embalse surte a unos
tres millones de habitantes de Valencia y de otros centros poblados. Pero, explica
Pérez Rodríguez, “las sustancias orgánicas abundantes en el lago, receptor de
aguas servidas, llegan al embalse, cuyas obsoletas plantas de tratamiento no
son adecuadas para potabilizar esas aguas, y además se obstruyen los
conductos”.
El embalse Pao-Cachinche
está en la ruta de colectores de aguas servidas de una zona con intensa
actividad residencial urbana, industrial y agrícola. “Los filtros de las
plantas potabilizadoras se retrolavan con esas aguas cargadas de residuos, se
obstruyen con mayor rapidez y entonces a la mala calidad se sobrepone la
escasez”, advirtió Pérez Rodríguez.
“En Venezuela no se
construyen plantas potabilizadoras desde hace 15 años. Se padece su falta de
reemplazo o mantenimiento. Las existentes no están preparadas para trabajar con
el aumento en cantidad y diversidad de contaminantes: colapsan, generando
escasez”, dijo a Tierramérica la especialista María Eugenia Gil, de la no
gubernamental Fundación Aguaclara.
El gobierno tiene planes
para desarrollar 18 nuevos sistemas de captación de aguas para potabilización,
construir 180 acueductos rurales, rehabilitar más de 500 redes de suministro y
perforar nuevos pozos para que la cobertura alcance en cuatro años a 98 por
ciento de la población, dijo el ministro del Ambiente, Miguel Rodríguez.
Venezuela está entre los 20
países del mundo con mayor disponibilidad de agua en su naturaleza, 41.886
metros cúbicos por habitante al año, semejante a sus vecinos Colombia y Brasil,
según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la
Agricultura (FAO).
Pero la distribución sobre
el territorio es otra historia: 90 por ciento de la población es urbana y 80
por ciento vive en el norte y el occidente, donde apenas se dispone de cinco
por ciento del agua dulce.
La mayoría de los ríos,
sobre todo los más caudalosos y extensos, se concentran en el sur. Y el grueso
de los habitantes, que se aglomeran en el norte, disponen de agua potable al
final de costosos procesos para llevarla hasta allí.
En la década de 1960,
comenzó a desarrollarse un polo industrial en el sureste bañado por los ríos
Orinoco y Caroní, pero los planes se discontinuaron. Mudar hacia el sur la
capital fue una idea sin destino. Ya en este siglo, el presidente Hugo Chávez
(1999-2013), fallecido el año pasado, propuso desarrollar un eje Orinoco-Apure
(su mayor afluente), algo que nunca salió del tintero.
El problema no es nuevo. En
1958, el entonces periodista Gabriel García Márquez (1927-2014) escribió un
reportaje titulado “Caracas sin agua”, recogido en su libro “Cuando era feliz e
indocumentado”, que podría calcarse casi seis décadas después para retratar el
presente de esta capital.
El ficticio protagonista de
ese reportaje del premio Nobel de Literatura era un alemán. Si “Gabo” pudiera
reemprender ese trabajo en 2014, podría inspirarse en cualquier habitante de
Caracas.
“Defender el Agua es Defender la Vida”